Escribo después de dar un buen paseo por el Monte de San Pedro. Ya hacía que no subía. Meses. Al ascender por la ladera desde el barrio de Los Rosales, me llevé la grata sorpresa de estar rodeado de una alfombra de flores amarillas.
Hoy hace muy buen tiempo. Desde el Monte se ven unas buenas vistas despejadas, sin edificios, del gran océano y de la Torre, además de toda la península atlántica.
Feliz comienzo de semana.
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